Otra de las numerosas colecciones que recopiló Bartolomé March fue la de cartografía mallorquina. En Mallorca, entre los siglos XIV y XV, se realizó una importante producción de cartas de navegar, firmadas por autores locales. Una gran mayoría de estas cartas salió de la isla y las más famosas acabaron en bibliotecas públicas o en manos de particulares. Fue tarea ardua reunir esta colección considerada una de las mejores del mundo. La muestra que se exhibe aquí, muy bien documentada, reúne un conjunto de gran interés tanto por su perfección técnica como por su preciosismo ornamental.